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Kicillof desdobla las elecciones bonaerenses y dinamita la interna con Cristina

El gobernador anunció que la provincia votará el 7 de septiembre y que enviará un proyecto para suspender las PASO. La decisión lo enfrenta con Cristina Kirchner, quien amenaza con ser candidata provincial si no se mantiene la elección concurrente. La pelea por el control del peronismo se intensifica.

7 de April
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“No podemos exponer a la gente a un caos”: Kicillof desdobla y desafía a Milei y CFK.

Rodrigo Lopez
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Rodrigo Lopez

Axel Kicillof oficializó este lunes una decisión que profundiza las tensiones dentro del peronismo y que apunta también contra el gobierno nacional: desdoblar las elecciones en la provincia de Buenos Aires, que se realizarán el 7 de septiembre. El gobernador justificó su determinación al asegurar que la implementación de la boleta única de papel, impulsada por Javier Milei, es “inviable” en comicios concurrentes.


“Votar el mismo día combinando dos modalidades distintas sería un caos”, afirmó, y explicó que los estudios y simulaciones realizados muestran que el tiempo de emisión del voto se duplicaría y generaría colas interminables y confusión en los votantes.


En ese marco, anunció también que enviará un proyecto de ley para suspender las PASO en la provincia, iniciativa que ya había sugerido un mes atrás en la apertura de sesiones. “No podemos exponer a nuestra gente a una elección caótica”, remarcó.


Pero la decisión no solo apunta a Milei. En el plano interno, Kicillof desoye el reclamo de La Cámpora y de Cristina Fernández de Kirchner, quienes quieren mantener la elección provincial el mismo día que la nacional. La expresidenta, incluso, dejó trascender su voluntad de ser candidata a diputada provincial por la Tercera Sección, pero condicionó esa posibilidad a que la elección sea concurrente. Es decir, si Kicillof no cambia de idea, podría haber ruptura.


El trasfondo de la disputa es el control de “la lapicera” en el cierre de listas: intendentes cercanos a Kicillof reclaman mayor protagonismo en la Legislatura bonaerense y están cansados de que las candidaturas las definan Máximo Kirchner y CFK. Consideran que, desdoblando, pueden capitalizar su peso territorial y sumar más legisladores propios, mientras que si van colgados a una lista nacional dominada por el kirchnerismo duro, quedarían relegados.


Desde el massismo también rechazan la jugada: consideran que desdoblar sería “un suicidio político”, ya que dejaría a Kicillof expuesto al embate de la Casa Rosada sin una estructura nacional de respaldo.


En paralelo, La Libertad Avanza quiere que la elección sea concurrente. Sin estructura ni gestión local para mostrar, necesitan nacionalizar la campaña y colgarse de la figura de Milei. Por eso también rechazan el desdoblamiento.


La interna escaló a tal punto que este lunes hubo cruce directo entre Carlos Bianco, ministro de Gobierno bonaerense, y Teresa García, senadora del PJ y mano derecha de Cristina en la Legislatura. Bianco acusó a La Cámpora de querer avanzar sobre las atribuciones del gobernador, y García lo mandó a leer el proyecto.


En este clima, Kicillof firmó el decreto que fija el 7 de septiembre como fecha de las elecciones provinciales. La pelea por el futuro del peronismo, el control de la Legislatura y el liderazgo opositor al gobierno nacional ya está en marcha. Y la grieta, esta vez, no es entre partidos, sino dentro del propio oficialismo.